Convertir las acciones en relato

Cierre de la conferencia — la narrativa colectiva:
“Convertir las acciones en relato”
por Jenifer L. Johnson.

Narrative Strategist, Founder StoryMind Inc.
jenifer@storymind-inc.com

Congreso Women 360° Congress Martorell 25 de enero de 2025

Introducción al relato colectivo:

Si me muevo por cualquier parte de nuestra sociedad, o por esta misma sala, me topo con cosas en el camino. Cosas invisibles.

Choco con estructuras, como andamios invisibles, que son las narrativas, las historias que circulan en nuestra cultura y en nuestras mentes acerca de cómo funciona el mundo y cómo encajamos en él.

Una narrativa es precisamente eso: un vehículo, un marco de ideas que nos ayuda a poner orden en la vida. Su función es guiarnos y crear significado.

Las narrativas de una sociedad relatan a sus habitantes lo que está bien, lo que está mal, lo que significa ser mujer, ser hombre, lo que representa el progreso, el éxito, las guerras, lo que debemos valorar, odiar, temer… y cuál es nuestro valor como seres humanos.

Pero a veces las historias van en contra de nuestro sentido común y nuestro bienestar, y nos producen confusión, nos paralizan. Puede que algunas de ellas nos impidan crecer.

Y la mayoría de esas narrativas son invisibles —lo que les da su poder— hasta que las buscamos. Entonces las vemos por todas partes.

Aquí, en Women 360°, hacemos lo invisible visible. Nos liberamos. Empezamos a ver esos andamios, reconocerlos y derribarlos, o construir otros nuevos, más creativos, más útiles, más humanos.

Además, es nuestra responsabilidad hacerlo.

Mi trabajo como estratega de la narrativa, consiste en ayudar a las personas a construir nuevas historias y desmontar las que ya no sirven. No solo necesitamos crear y transmitir nuevas historias, sino encarnarlas. Vivirlas.

Así que, me han encargado componer un breve relato de este congreso, de todas las ponencias. Escuchar vuestras voces, ideas y acciones, y entrelazar los hilos. Tejer. Aquí, en vivo, en el Molí Fariner.

Si leeís este relato con curiosidad y atención, seguro que podéis veros en él. Cada uno y cada una.

……………….………………………..

Shhhhhh…. Escuchad…. ¿Lo oís? Un susurro…
Ahh… es la molinera, nos está hablando.
La gran matriarca. Emprendedora. Artesana. Sabia.

Nos escucha desde el pasado, al lado del río Anoia. También nos escucha desde el presente, aquí y ahora. Y, como una buena molinera, con una mirada hacia el futuro.

Escuchad… Nos susurra la palabra “construir”.

“Construir un futuro más consciente”, afirma la molinera.

Trigo, harina, pan…

Es importante ser consientes que nosotras somos el motor del cambio. Y la perspectiva femenina tendrá su espacio dentro de las empresas e instituciones.

En nuestras empresas hay talentos que no se ven. Nuestra responsabilidad es hacerlos más visibles. Iluminarlos. Liderar.

Necesitamos formarnos en la empatía y ser conscientes de los sesgos. Es una manera de fortalecer el liderazgo. Si los y las líderes no ven y no sienten, si no desarrollan su capacidad de empatía y de actuar con compasión, la cultura no puede cambiar.

La molinera repite: – “Nosotras somos el motor del cambio.”

– “Requiere valentía”, dice ella. “De cada uno, de cada una.”

Y también requiere salud.

¿Qué tal si hacemos un viaje hacia el futuro?

Hmmm. ¿Qué veríamos…?

¿Enfermedades, aire denso, contaminación? …. ¿O veríamos una ciudad verde, con un equilibrio entre las personas y su entorno: el planeta?

¿Hacia qué futuro vamos ahora?

En gran parte, depende de nuestras compañías. Y si son “companies for health”.

Existe una realidad: la salud del planeta y la salud de las personas están interrelacionadas, y la salud profesional de las mujeres influye en la salud de la sociedad.

“Trigo, harina, pan….”, canta la molinera.

Trigo, harina, pan — una buena metáfora para el embarazo y la maternidad.

¿Sabíais que en nuestro país muchas mujeres están retrasando la maternidad hasta más adelante en su vida?

La molinera sonríe; tuvo su primer hijo cuando tenía 35 años … algo que ella misma escogió.

Pero no aprendió sobre el cuerpo de la mujer en la escuela y le sorprende ver que hoy ha cambiado muy poco esta realidad.

Lo que sí ha cambiado es la posibilidad, cada vez más común, de congelar los óvulos hasta que sea el momento correcto para la mujer.

“Trigo, harina congelada y pan…”, canturrea la molinera con una sonrisa.

De repente, la molinera deja de cantar y presta atención. Está escuchando unas palabras que nunca había oído: “síndrome genitourinario.”

Y al comprender su significado, se da cuenta de que había tenido todos los síntomas en un momento de su vida, pero no había podido hablarlo con nadie. Ni siquiera con el médico.

Ahora sabe que no lo estaba imaginando. Es, era real.

Y ahora puede tratarse y prevenirse con naturalidad.

La molinera suspira … y siente algo de confort. Efectivamente, no se estaba volviendo loca, aunque los demás no le hacían caso.

Hay otro tema que a veces es visible y a veces invisible. Muchas mujeres lo viven —una fatiga inexplicable.

Todas sabemos lo que es la fatiga, pero cuando te incapacita y no puedes hacer las tareas cotidianas, cuando no tienes energía para convertir el trigo en harina… es preocupante.

Así que, reivindicamos espacios de ejercicio y movimiento físico dentro de las empresas.

Reivindicamos que se tomen en serio los síntomas.

Reivindicamos visibilizar los múltiples componentes y realidades de la fatiga crónica y la fibromialgia.

Y reivindicamos dar importancia al estado de nuestras líbidos.

La molinera se sonroja. “Ahh… la líbido”, susurra lentamente.

Y hablando de la líbido colectiva, esto nos conduce naturalmente a un tema, casi un tópico:

el “networking.” Vamos a pronunciar algunas ideas que tienen que ver con este suculente tema:

– Rrrrrrumbo: tener un fin en mente pero ser flexible.

– Heart: tú eres el proyecto, hazlo crecer.

– Sí, sí, sí: adoptar una actitud de ¿por qué no?.

– Win win: eres generosa, las demás también.

Sobre todo, es vital añadir un elemento de juego cuando invitas al otro a conocerte, a conoceros. Recuerda: el felpudo lleva tu nombre.

Pero, esperad, esperad… antes de empezar a hacer networking, os quiero hacer una pregunta a cada una y cada uno: ¿Os consideráis líderes?

La historia nos dice que es un concepto antiguo y que está evolucionando.

¿Sabéis identificar vuestro estilo de liderazgo? Recuerda que el liderazgo nace desde dentro de una persona y se proyecta hacia fuera.

Sería interesante conocer las historias del liderazgo dentro de nuestras propias familias, ¿no?

La molinera está quieta, pensando. Está pensando en sus antepasados y en sí misma, porque ella sí sabe que ha sido líder en su comunidad. Aunque nunca lo hubiera expresado de esa manera.

“Hmmm”, pensaba ella, “quizás debería hacer ‘coaching de estilo de vida’ para entender un poco más sobre mi propia manera de liderazgo. Nunca es demasiado tarde…”

Parece que hay un círculo – y gira como un molino: seguridad, autoestima, autoconocimiento.

Tres elementos imprescindibles para ser un líder consciente. Para evolucionar.

Trigo, harina, pan.

Continuamos con este número místico del 3: Igualdad, inclusión, formación. Tres conceptos clave.

La igualdad es un desafío, y también un reto político.

Porque existen:

brechas laborales,
subrepresentación en espacios de liderazgo,
precariedad laboral, y
violencia de género

Al escuchar las últimas palabras, los ojos de la molinera se humedecen.

Ella vivió violencia en el trabajo en su juventud y no pudo hablarlo con nadie.

Para transformar el mundo, se necesita formación – es el motor del cambio social.

Formación durante la infancia.
Formación en el ámbito laboral.
Formación para el sector público

Igualdad, inclusión y formación: son los pilares para un futuro mejor. Para nuestro futuro.
La formación es un tipo de poder.

P – O – D – E – R

El poder de la empresa fomenta el respeto por las y los trabajadores. No se banalizan los temas importantes.

Hay 5 puntos del poder empresarial saludable:

Una cultura de seguridad como base.
Líderes que sean un referente en comportamiento y é
Buena gestión de los riesgos psicosociales.
Comunicación y apoyo emocional.
Corage para tomar decisiones estructurales y de recursos.

Y ¿qué ocurre cuando hay diferentes generaciones en una misma empresa?

… Z, Millennial, X, Boomers, Silenciosas … Cada generación valora algo diferente.

La molinera frunce el ceño. Cuando ella trabajaba, todos los miembros de la familia trabajaban juntos y no lo cuestionaban. Eso sí, no siempre fue fácil.

De hecho, ella fue la última molinera de su familia. Los jóvenes ya no querían dedicarse a eso. Tenían otros sueños.

Hoy en día, una empresa multigeneracional debe ofrecer un entorno seguro y flexible. La clave del éxito es una cultura de mentoring. Que todo el mundo se sienta acompañado.

Las personas tienen que sentirse valoradas y felices en su trabajo. Ese es el verdadero reto.

Ahora vamos a enfocarnos un momento en las y los jóvenes.

¿Lo tienen más fácil en este momento histórico?

La molinera sacude la cabeza; ella cree que lo tienen difícil.

La presión que viven cada día en las llamadas “redes sociales” es impensable para ella. No lo puede ni concebir.

Lo que sí se ve en la sociedad es una falta de inteligencia emocional.

Y no, no lo tienen fácil, las generaciones jóvenes. Lo tienen diferente.

¿Y las más maduras?

La molinera levanta una ceja, esto le interesa. Claro, ¡tiene más de 200 años!

Es importante ser proactivas en la madurez. Y la red de contactos es una valiosa fuente de oportunidades. La capacidad de aprender nuevas habilidades también es importante.

Porque no nos vamos, seguimos aquí. Y tenemos buena calidad de salud. Somos una sociedad longeva.

‘Longeva’, qué bien suena, ¿verdad?

Y, por cierto, no sería un relato completo sin hablar del mundo digital y la edad.

¿Sabíais que las mujeres representan solo el 20% de los especialistas digitales en España?
Esto nos dice que hay un océano azul para nosotras.

Algunas mujeres estamos diciendo:

“Adiós” a la vida convencional.
“Hola” a nuevos retos. “Hola” a nuevas oportunidades.

Es un trío: edad – experiencia – oportunidad.

Adiós a la competitividad, hola a la colaboración.
Al liderazgo femenino.
Al liderazgo consciente.
Al liderazgo digital para mujeres maduras y aventureras.

La molinera nos mira detenidamente.

“Recordad”, nos dice, “recordad vuestra propia humanidad, vuestra empatía.”

Shhhhhh. Escuchad…. ¿Lo podéis oír?

Es el latido de tu corazón.

El canto rítmico de la mujer, de la sabiduría, del futuro.

“El futuro está aquí”, dice la molinera.

“Estáis dando forma a él con cada palabra, con cada decisión, con cada acción.”

“Con cada giro del hermoso molino de vuestra imaginación colectiva.”

Trigo – harina – pan.

………………

The end.

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